PASEAR DEL BRAZO

Siempre me ha gustado pasear, hasta me gusta vestirme diferente según por donde vaya a ser el paseo;pienso en el conjunto más que en el itinerario y sólo me permito los tacones cuando el recorrido lo merece,es decir...cuando va a haber paradas interesantes:una buena cafeteria para mirar de reojo,para escuchar sin disimulo alguno,para que el café consiga que continue mil metros más.Paseo mucho sola.Sin tacones y sin compañía;lo que es un fastidio porque si hago algun descubrimiento,no importa de que clase,tengo que volver con acompañante a enseñarselo.Eso me ha pasado montones de veces,y, en mi afan descubridor, he llegado a recorrer bosques urbanos de vestidos,faldas,flores y cajas chinas hasta el infinito.
Había pensado ofrecer en este blog,mi brazo derecho al que quiera pasear conmigo,al que no le importe mirarlo todo y hablar casi siempre de lo mismo,al que le guste estar mas de diez minutos mirando el escaparate de Prada como si fuera una pastelería repleta de piruletas,al que pierda el apetito si ha visto un color combinado con otro de una forma que nadie antes hubiera pensado,que no le importe buscar lo que todos dicen que no existe.
Si hay alguien así,o casi igual que se venga conmigo a pasear del brazo.