SUR MESURE

Ibiza debería estar prohibida o ser pecado.Porque después de dos días,no hacen falta más, tu piel se cubre se una fina capa de aire,agua y sol que al cabo de ocho días se transforma en un mono ajustado que favorece mucho.Un mono que te cubre pies,cabeza y manos;de esos que podría idear la Maison Margiela o quizás Nicolas Ghesquière.Una prenda que no te quieres quitar,con la que puedes sentirte parte del paisaje,porque se ha confeccionado a base de paseos a toda velocidad en el escarabajo descapotable rosa de Susy ,pespunteando playas,frunciendo chiringuitos y recortando atardeceres.Ibiza tiene buen patronaje por eso sienta tan bien.
Recién llegada te das cuenta de que has de arrancarte el mono que cubre tu piel a fuerza de exfoliante,y te empeñas en que siga ahí pegadito aunque a veces pique.Pronto te das cuenta de que no es igual,porque en Madrid no hay montañas que se superponen difuminadas al caer la tarde,porque la única arena que puedes pisar es la que se ha quedado en tu capazo,y es tan poquita ,que ni siquiera cubre el parquet. Así que sales a la calle a lucir lo que queda de ese fantástico mono y explicas a todo el que pasa que te lo han hecho a medida (sur mesure).