MAISON MARTIN MARGIELA PARA MI HOMBRO CONGELADO
sábado, 24 de octubre de 2009
Cuando era pequeña mi madre me decía : - te tenía que haber puesto Lola , por Dolores , en vez de Delia , porque hija mía siempre te duele algo - . Me lo dijo muchas veces y creo que me acostumbré a aguantar el dolor sin decir nada , aunque sólo fuera por evitar el cambio de nombre .
Llevo más de seis meses soportando un dolor en el hombro , hasta me propuse no hablar de él en el blog ,ni dedicarle la mínima atención, hacer como que no iba conmigo , para que se fuera cuanto antes . Pero el dolor no se ha ido,sino que se ha hecho mayor y mi hombro dolorido no deja que mi brazo funcione con normalidad , y , en pleno día , soy una privilegiada porque soy "veo las estrellas" cuando me hago la coleta , que ahora es bastantes centímetros más baja; hasta puedo contemplar constelaciones enteras cuando me pongo mi abrigo entallado .
La semana pasada decidí ir al médico,que me echo una buena bronca por haberlo dejado tanto tiempo y su diagnóstico fue : hombro congelado , si , congelado como las croquetas de jamón que compro en mercadona , congelado como debía estar el mamut que me toco en los huevos kinder .
Congelada me quedé yo cuando me dijo que mi único tratamiento serán ejercicios de rehabilitación en los que me saltarán las lágrimas de dolor porque es lo que tiene descongelar un hombro : no es tan sencillo como descongelar el pan.
Descongelarme iba a consistir en hacerme llorar al lado del fisio ¡¡ que cuadro pensé yo ¡ y me eche a llorar , por si las lágrimas ayudaban a que el proceso de descongelación fuera más rápido .
Aún estoy pendiente de unas pruebas , antes de que decidan que hacen conmigo : torturarme o mandarme directa a la mesa de operaciones . Yo , mientras miro mi hombro congelado pienso porque no hay un tratamiento con hombreras de Balmain , vestidos de Givenchy o este mono con aberturas en las mangas de Maison Martin Margiela que sería perfecto a la hora de arropar hombros congelados .