VOGUE PARIS TE ARRANCA LA CAMISETA

Hoy he estado pintando con la lavadora puesta ,  después de lavarme el pelo , secarlo y darme cuenta que tendría que ponerme tocado artilugio tipo Burguer King si no quería que me cayera algún pelo encima de la pintura . Mientras pienso el diseño del tocado para evitar un ataque de nervios hago un ejercicio con mi pie derecho que consiste en coger un pañuelo con el pie unas veinte veces para fortalecerlo ,  imagino esperanzada que por la tarde mi osteopata descubriría el ungüento amarillo para curarme.
Con mi yelmo anticaida mi cuadro blanco sobre blanco no peligra y pienso entonces en mi piel hiperpigmentada , en mis ojeras trasnochadas , en qué podría comer o dejar de comer para no retener líquidos , y entonces lavo los pinceles y mientras la pintura blanca se escurre ligera por el fregadero , pienso en que me gustaría ser pintura blanca , ligera y sin hiperpigmentación .
Me pongo contenta porque los que quiero están bien , porque mis amigos van encontrando sus caminos , sin asfaltar , pero adecuados para poder seguir adelante . Entonces me pone triste el dolor ,  la resignación ,  la cantidad de ropa que me he comprado y no me he puesto.
Bebo agua porque siempre tengo sed , me pruebo otros zapatos , esta vez planos , y hasta el pasillo me dice que no funcionan , pienso en que tiene que haber una solución con la que hasta mi pasillo este contento .
Tengo un post esperando en borradores hace días , publico otros antes que ese , pienso en el próximo texto . Entonces descubro a Daria en el Vogue Paris con una camiseta gris preciosa y un chico trajeado que se la arranca , foto de Mario Testino. Me encanta la diagonal que forma su brazo , y ese anillo en su dedo , la mesa , y la lampara ; pero vuelvo a Daria y la adivino pensando en la próxima sesión , o en la fiesta de esa noche , o en que esta deseando que le arranquen la camiseta de una vez , macharse hasta el próximo numero de Vogue , tendrá que encargar un ramo de de rosas blancas para Carine Roitfeld ; tiene que planchar una camisa vieja , su preferida  , mientras la plancha imagina que se la arrancan botón a botón .