VOLVER
lunes, 28 de abril de 2008
He vuelto a Barcelona.Ha sido un viaje rápido,inesperado,con maleta pequeña,vestuario de playa otoñal y ganas de escapar y oler a chiringuito.
Confirmo que Barcelona es de color azul,que como dijo Goethe , como color , es similar a una negación estimulante cuyo efecto es una mezcla de excitación y serenidad.
He vuelto al mar,y lo he mirado mil veces para que nunca se me olvide.
He comprobado que las ciudades no son mejores ni peores,son sensaciones particulares como el calor y el frío;he confirmado que las ciudades son mejor aún cuando las vuelves a ver después de un largo tiempo y sabes que tendrás que dejarlas.
He encontrado a gente que me ha abrazado fuerte,que me ha preguntado mil veces ¿que tal estás?,que me hablaba rápido y mucho porque no había tiempo para resumir tantos meses.
La ciudades son calles que te llevan en volandas igual que las conversaciones que mantuve.
Barcelona es sol,es playa,y eso ha sido lo único hacia donde he mirado esta vez,lo único que voy a echar de menos cuando vuelva a Madrid.
En Madrid,que es de color rojo intenso, aún no he elegido hacia donde mirar;porque por ahora,como los niños,lo miro todo a la vez con la boca un poquito abierta.Para allí voy.
0 comentarios:
Publicar un comentario